La pregunta que siempre me hago, y no solo cuando se trata de un viaje, es ¿PARA QUÉ?, pero la respuesta se las voy a contar un poco más adelante.

La idea de recorrer parte de Europa y de África en bicicleta la venía sintiendo hace un tiempo. Y digo sintiendo porque para mí no es solamente armar la mochila e irse a otro continente. Es sentir el momento en el que tenés que partir y a dónde querés ir. Al igual que nos pasa cuando después de 1 año o más tiempo “sentís” que es momento de volver. Al fin y al cabo nunca se parte y se regresa de ningún sitio ya que continuamente estamos en movimiento. Regresamos para partir y partimos para regresar. Lo importante es saber qué aprendemos durante esos procesos.

Fue una tarde de enero de 2019, durante el último viaje en moto que hice por el norte de Argentina, cuando tomé varias decisiones. Entre ellas estaba el tema del trabajo. Siempre digo y afirmo que me siento un privilegiado por trabajar no solamente en lo que me gusta sino en lo que me apasiona. Ser fotógrafo, escritor y coach ontológico es una combinación perfecta, aunque claro, ser freelance no siempre es el camino más fácil. Pero si el que me hace más feliz, más allá de cuánto dinero gane. No existe el adjetivo poco o el mucho. Existe vivir en gratitud por todo lo que llega, entonces siempre siento que vivo con ABUNDANCIA.

Lo que veía con bastante claridad es que no quería poner la energía solamente en ganar plata, en ahorrar para un viaje y estar en Buenos Aires, ciudad a la que amo y disfruto enormemente cuando no viajo. Quería trabajar durante el viaje, hacerlo autosustentable, como tantas veces hice en otras ocasiones.

Del 5 al 20 estaré en Barcelona y el 21 empiezo a rodar las rutas de los países balticos con “Casiopea”

Charla viajera a modo de despedida en Fábrica Iozzer. Ese día estaré compartiendo muchos tipos sobre cómo preparar un gran viaje!

Hay dos preguntas que me hacen bastante en este último tiempo: 1) ¿Por qué no en moto o haciendo dedo como viniste viajando todos estos años? 2) Ya te querés rajar, no? Y estas son las respuestas:

  • Decidí que el viaje sea en bici por varias razones: a) es más lento que la moto obviamente y mucho más lento que cuando subo a un auto que paró en la ruta. Esa “lentitud” es la que estoy necesitando. Viajar despacio para aprender a ver las cosas con otro color, con otro ritmo. A conectarme más con los paisajes y con la gente. No porque no sucediera antes, sino porque el ritmo lento permitirá que todo eso sea más profundo e intenso. Con cada cicloviajero que me crucé y voy conociendo todos coindicen en la empatía que genera viajar en bicicleta. Y para mí ese es el sentido de un viaje: conocer gente y aprender de ellos.
  • ¡No, pará!, les aclaro. No me estoy rajando a ningún lado y tampoco tengo apuro en irme, porque si estoy pensando tanto en el futuro no puedo disfrutar de todo lo lindo que tiene estar en esta ciudad (la familia, paseos, los parques, charlas con amigos, etc). Claro que le dedico tiempo a organizar el recorrido y a toda la logística que es infinita (vacunas, visas, fronteras, épocas de lluvias, enfermedades, países en conflictos, alimentación durante altas temperaturas, equipamiento, repuestos, etc, etc), pero ahora estoy acá. Rajar lo asocio a alguien que quiere escapar de algo o de una situación en la que no está a gusto y eso por suerte no me pasa. Muy distinto sería decir necesito un cambio hacia un espacio que me hace bien, me nutre. Y ese espacio es un viaje largo. Tan largo como tenga que ser.

Si bien llego a Barcelona el 5 de junio y me quedo allá 2 semanas, el viaje propiamente dicho comienza en Tallin, Estonia. Ahí es donde me subiré a la bici para recorrer los primeros kilómetros. ¿Cuál es la finalidad de ese primer recorrido? Al igual que con África visitar países en los que nunca estuve (Estonia, Letonia, Lituania, Bielorrusia, Ucrania, Rumania, Moldavia, Eslovaquia, Eslovenia, Liechtenstein y Portugal. Si el frío europeo no me alcanza en el calendario seguiré en bici y sino tomaré algún tren para que a fines de noviembre pueda cruzar a Marruecos y comenzar sin épocas de lluvias en África. Por otro lado por el momento no quiero visitar países en los que estuve hace un tiempo.

Todo listo para salir a recorrer en junio las rutas europeas. Los invito a seguirme por Instagram

Y acá empiezo a responder un poco la pregunta inicial: ¿PARA QUÉ? Lo más obvio sería decir para cumplir el sueño de llegar a los 100 países (por ahora son 87) que es algo que anhelaba desde chico. Pero eso será una consecuencia más que nada. ¿Para que? , entonces. Para desafiar mis propios límites y saber que seré capaz o al menos intentaré pedalear más de 15.000 km (hasta Nigeria es uno de los objetivos). Para dar y compartir experiencias. Para ayudar a los que están ayudando en alguna fundación, ONG, etc y colaborar con su causa. Para escribir un nuevo libro. Para salir de la comodidad de mi casa. Para dormir en una aldea con desconocidos y ver cielos estrellados (en Bs As con tantas luces no los tengo). Para probar nuevos sabores. Para renovar la capacidad de asombro. Para seguir rompiendo prejuicios, los propios y los ajenos. Para confirmar que el mundo es mucho más hospitalario de lo que muestran los medios. Para sanar algunas situaciones personales. Para dedicar el viaje a los que quiero y me quieren. Para renovar energías. Para descubrir con mis propios ojos todas las caras que tiene África.

La lista es infinita y más cuando me pongo a pensar en todo lo que vendrá al entrar a este continente. Al llegar a Nigeria voy a evaluar varios puntos: el cansancio, la plata que tengo, los futuros recursos, mi salud y la de mi papá y saber si es momento de seguir hasta Sudáfrica o no. Claro que quiero, pero no todo depende de uno (a veces).

Puedo decir que tengo todo lo técnico que necesito para emprender un largo e increíble viaje. Lo que no tengo son todas las respuestas a muchos interrogantes y eso es lo que también voy a buscar. Hoy, decir que viajaré un año o un poco más me sabe a largo, al igual que a muchos. Pero estoy convencido que al volver todos (incluyéndome) diremos, “Uy, que rápido que se pasó”, “Ya volviste”. Por eso ahora es momento de disfrutar. Viajar en bici por Europa y África está en la cuenta regresiva.

Lo que quiero compartirles y no es un detalle menor es el nombre que le puse a la bici: “Casiopea”. ¿Por qué? Recuerdo que hace varios años llevé a mi sobrina a ver una obra de títeres que se llamaba “Paso a Paso”. En la obra el rey León está por celebrar una gran fiesta a la que están todos los animales invitados. Casiopea, la tortuga, quiere asistir a pesar de la distancia que la separa del lugar, del tiempo y de todo el esfuerzo que le llevará. En el viaje, los animales que se cruzan en su camino intentan persuadirla para que abandone su deseo de asistir. Pero ella convencida de que es posible sortear todas las dificultades y llevar a buen término su travesía continúa lentamente sin parar, “paso a paso”, su viaje hacia la fiesta.

Yo soy un poco Casiopea, con la bici siempre me muevo lento, no tengo una gran fuerza de piernas ni un súper estado físico, pero si estoy convencido de que quiero recorrer este camino más allá de que muchas personas no me apoyan y de los futuros obstáculos que llegarán. Los africanos tienen un concepto donde el problema nunca es un problema, sino un desafío.

Itinerario aproximado a recorrer con Casiopea desde Estonia hasta Sudáfrica si todo sale bien

Si estás en Barcelona el 20 de junio nos vemos en BIKE TECH para compartirles historias de viaje

Por último agradecer infinitamente a todos los que se suman en este viaje:

Alforjas Halawa (por el kit completo de alforjas) – Portaequipajes Iozzer (delantero y trasero y portabidones) – Seguro Médico Asegura tu viaje (por la cobertura anual) – Bike Techs SL de España (por las cubierta S. Marathon Plus y el espacio para la conferencia del 20 de junio) – Antigua Casa Cesto (por las banderas) – Zurbike (por el bolso para las herramientas y portabidón del manillar) – RLM (por el manubrio mariposa) – Tierra de biciviajeros (por la cinta del manillar, puntera de pedales, guardabarro, herramienta ajuste de rayos).

Gracias por ser parte de este gran viaje.

Si querés ver cómo fueron los viajes en moto por Argentina te invito a ver estos POST!

Un video que contagia inspiración a recorrer el mundo en bici. No te lo pierdas!

Si viajás en bici, dejá un comentario y así todos podremos seguir aprendiendo sobre este estilo de vida y de viaje. GRACIAS!